13 feb 2008

Análisis de Escultura

CONCEPTO DE PLÁSTICA.

El sentido originario - y el más restringido - del término "plástica" deriva del griego "plastiké" (lat. "plastica"), o arte de modelar, y se refiere en concreto a aquella actividad escultórica que utiliza materiales blandos, modelables por la mano, y que, por tanto, se diferencia de aquella otra escultura que - derivando del termino latino "sculpere" - utiliza materiales duros sobre los que la operación realizada no es de modelado, sino de talla. Ya se vera en el segundo capitulo la trascendencia que esta dualidad técnica ha tenido en la concepción de la escultura y las controversias que ha suscitado entre los propios escultores.

De este significado restringido pasó la plástica a denotar a toda la actividad escultórica en conjunto, utilizándose como sinónimo de escultura. Así, en latín, la "plastica ratio" alude a todos los principios que rigen la escultura, tanto si utiliza el procedimiento de modela do como el de talla. Ha sucedido que en las lenguas modernas ha prevalecido y se admite normalmente el termino escultura para cubrir ambos procedimientos de modelado y talla, pero existen lenguas que prefieren el término plástica para designarla: así, en alemán, "die Plastik", o en italiano, "la plastica". En esta acepción, pues, todos los objetos producidos en escultura pueden ser descritos como plastica, y hablar de efectos plásticos es tanto como referirse a las características propias de la escultura.

En un tercer sentido más amplio y genérico, derivado del verbo griego "plasso", formar, lo que corresponde al dominio de las formas, las artes plásticas denotan a todas aquellas obras que se dirigen más directamente a los sentidos de la vista y del tacto, al estar realizadas con alguna sustancia material. En este sentido, dentro de las Bellas Artes, las artes plásticas quedaban diferenciadas de la música y de la poesía. Kant incluyo entre las artes plásticas a la arquitectura y a la escultura, atendiendo al criterio del volumen; posteriormente, Schopenhauer prescindió de la arquitectura para dar entrada a la pintura. Esta última restricción de Schopenhauer puede provocar la confusión entre el termino "plástico" y "visual", al predominar, como se ha dicho, los prejuicios visuales en la concepción de la escultura y pintura, pero no debe olvidarse que plástico vale tanto como formal, y las formas solicitan a la vez los sentidos del tacto y de la vista. De hecho, hoy día, con el término plástica se alude en numerosas ocasiones a todas las manifestaciones artísticas consideradas en este libro (no solo a la escultura y a la pintura, sino también a la arquitectura y a las artes decorativas, en general).

Características específicas de la escultura

"Puede decirse que, para que la escultura haya llegado a la autoconciencia de su propia naturaleza, ha hecho falta todo este proceso de independización respecto de las demás artes y, en especial, la liberación del marco arquitectónico al que ha estado sujeta y la eliminación de las confusiones con la pintura... El hombre necesita crear escultura como un recurso para establecer y desarrollar su propio sentido de la existencia real, que toma de la propia tridimensionalidad del cuerpo humano.

Nuestro conocimiento de la realidad solamente es completo cuando hemos agotado todas nuestras reacciones sensoriales hacia ella. Como se ha dicho, nuestros sentidos de la vista y del tacto están activamente implicados en nuestras experiencias estéticas (en las que ahora fundamentalmente nos interesan, pues no se ha hablado para nada del sentido del oído, básico en la experiencia musical).

Lo que ha sucedido es que con frecuencia resulta difícil separar y aislar nuestras reacciones visuales de las táctiles, y demasiadas veces incluso la vista ha sustituido al tacto en la experiencia estética. Pero, repitámoslo una y otra vez, la escultura es el arte de acariciar, palpar, tocar y manejar los objetos. Tocar es realmente la única manera por la que podemos tener una sensación directa de la forma tridimensional del objeto.

Si la escultura tiene alguna particularidad específica, ésta es la de su preferencia sensaciones táctiles. Esto no quiere decir que se rechacen en absoluto, como tal vez pudiera concluirse por lo expresado hasta ahora, los valores estéticos de la escultura que está concebida visualmente. De lo que se trata es simplemente de introducir algo de claridad y distinción en un tema que tradicionalmente ha sido objeto de confusiones.

La sensibilidad escultórica es una sensibilidad táctilmente a la pictórica que es visual y mental. Esta sensibilidad táctil debe efectuar una triple operación para constatar las características específicas de la escultura, para que la calidad escultórica de un objeto sea completa. Y aunque estas operaciones pueden separarse a nivel de análisis, sin embargo, a nivel de experimentación y de realización de la obra escultórica, deben estar integradas en un solo acto. Me refiero a los tres factores ya formulados por Herbert Read: 1) la sensación de la calidad táctil de las superficies; 2) la sensación de volumen sólo se da en relación con el espacio que dicho volumen ocupa; 3)la sensación de masa, íntimamente relacionada con el peso del objeto escultórico.

Para experimentar cada una de estas sensaciones cada lector debería estar provisto de una pieza de escultura que poder acariciar, con el fin de experimentar la sensibilidad plástica, ya que estas sensaciones sólo pueden ser aludidas en las descripciones. Se comprenderá que si esta palpabilidad es irrenunciable e insustituible la experiencia de la escultura no puede ser en ningún caso suplida por las láminas, las diapositivas o cualquier otro medio visual utilizado normalmente en la docencia artística.

A las habituales deformaciones de la diapositiva (tamaño natural, calidad de los materiales, etc.), se añade en este caso la imposibilidad de producir en su totalidad plástica la obra de escultura. Sólo los «vaciados» en material plástico pueden suplir el volumen escultórico y la escala real, pero sustraen en todo caso dos de los factores aludidos, como el efecto táctil de la calidad de los materiales y la sensación de masa y ponderabilidad; con todo, en algunos museos se ha recurrido a exponer vaciados e incluso copias de las esculturas más famosas con fines didácticos.

Provisto ya el lector, aunque sea imaginariamente, de una pieza escultórica, puede acariciarla para experimentar la calidad táctil de sus superficies calidad que dependerá no sólo del material empleado sino del tratamiento dado a los planos o superficies externos (la texturación). La propia naturaleza de los materiales empleados (mármol, bronce, piedras, madera, etc.) ofrece ya distintas calidades de dureza, opacidad, ductilidad, frialdad, impenetrabilidad, etc., que son transmitidas a través del contacto directo mediante el tacto. Independientemente de esta calidad material, todavía puede apreciarse la calidad de las texturas, de los diversos tratamientos superficiales, que pueden ir desde lo liso, fino y pulido hasta lo áspero, rugoso y aristado, produciendo sensaciones táctiles muy diversas. Pero, con todo, este primer factor de la experimentación táctil de la escultura, por el hecho de ser superficial también puede apreciarse en la pintura, ya que el plano, la superficie es uno de los elementos del hecho pictórico. (...)

La sensación del volumen es decir, de la tridimensionalidad espacial es experimentable en las piezas pequeñas de escultura, en aquellas que se pueden envolver con las manos, porque de lo contrario se exige ya el esfuerzo mental que Moore requiere del escultor, al decir que «cualquiera que sea el tamaño de la forma escultórica, el artista la concibe en su cabeza como si la estuviese sosteniendo completamente encerrada en el hueco de su mano». Es por esta razón por la que los valores volumétricos de la escultura se han dado antes, independientemente del período o estilo artístico, en aquellas piezas pequeñas de escultura, en las obras escultóricas en miniatura.

Por otra parte, el volumen, la tridimensionalidad, no debe ser apreciado como una simple coherencia de los planos o de las superficies, por el contrario esta sensación no debe ser relacionada sino integral, sabiendo «cuando se mira una parte, cómo es la otra», es decir como si se estuviera a marcando en su totalidad.

Otro paso en la sensación volumétrica es el dado clarividentemente por Rodin, cuando afirma que «en lugar de reproducir las diferentes partes del cuerpo como superficies más o menos planas, las represento como proyecciones de volúmenes interiores». Este proceder creativo, que opera desde dentro hacia fuera, anula el carácter superficial del plano y crea la sensación de volumen, de tridimensionalidad.

Por último, en la apreciación del volumen ha de tenerse en cuenta que éste se valora tanto por la propia presencia sólida y tridimensional del objeto escultórico cuanto por el espacio que este cuerpo sólido desaloja, y que, por así decirlo, crea en torno a él. Y en este aspecto ya se habrán sacado consecuencias sobre la incidencia que la propia conciencia espacial y la concepción del espacio en cada época artística han tenido sobre la escultura, en cuanto que ésta es un objeto que ocupa un espacio mental y no sólo un lugar físico, lo que es evidente desde el punto de vista de la calidad sólida del objeto. En épocas en las que no ha existido conciencia espacial, las propias esculturas, a pesar de su estereometría (como en Egipto) no dejan de ser planos que envuelven un sólido, careciendo de espacio y, por tanto, de volumen, en sentido escultórico.

La tercera sensación que se obtiene en la escultura, la de la masa, y su correspondiente efecto de peso, es fácil de sentir en los pequeños objetos manuales; ya cuando la escala aumenta llega de hecho a ser inconstatable humanamente por el exceso de peso, pero la sensación debe ser sentida por el escultor, cualquiera que sea el tamaño de la obra. El artista se proyecta en el interior de la obra escultórica, y como Moore expresa con sencillez, pero con sublime exactitud, «se identifica con el centro de gravedad, con la masa, con el peso». Incluso todos tenemos conciencia diferenciada del peso de los distintos materiales utilizados en la escultura (el mármol, la madera, etc.), que puede contribuir a suplir la imponderabilidad de la obra.

Lo que ha sucedido es que, en determinadas épocas y estilos, estéticamente se ha anulado la sensación de masa o de gravidez. Esto es especialmente constatable en la época barroca, donde por el dominio de la estructura visual de la creación artística parece que las formas escultóricas se han liberado de la ley de la gravedad que no tienen peso. Se ha hablado incluso de formas que vuelan y que hasta se desvanecen, que ya no son palpables. No se ha podido llegar más lejos en la negación de la solidez escultórica.

Sólo, pues, cuando la sensación de la escultura es integral y reúne los factores mencionados de calidad táctil de las superficies, volumen y espacio, masa y peso, sólo entonces sólo entonces la escultura ha adquirido su completa independencia física y estética. Sólo entonces puede expresar aquellas calidades que le son específicamente propias.

Sin embargo, en nuestros días, el arte contemporáneo ha protagonizado una ruptura profunda como consecuencia de la cual no sólo se han alterado las técnicas v mudado los materiales, sino hasta la propia naturaleza de la obra escultórica. De estos nuevos rumbos, a veces inquietantes, que parece seguir la escultura contemporánea, y que en buena parte se alejan y ponen en tela de juicio lo que la propia escultura ha llegado a ser como expresión artística (y cuyas características específicas se han esbozado aquí), se tratará al final del capítulo siguiente, para concluir el arte de la escultura."

ASPECTOS BÁSICOS

1.- Características específicas:

- Volumen: espacio que ocupa y que se percibe a través de la forma-superficie.

- Sensación táctil: textura, calidad, temperatura,...

- Masa: peso del objeto en relación al volumen:
- peso real de los materiales.
- sensación que produce de peso.

2.- Tipos de esculturas:

- Exenta o de bulto redondo.
- Relieve alto, medio, bajo (normal o schiacciato) y rehundido.

3.- Materiales y técnicas:

- tallado
- modelado
- vaciado
- construcción

4.- Expresión formal:

- escultura abstracta.
- escultura figurativa: - naturalismo: - realismo.
- idealismo.
- esquematismo.

5.- Luz y color :

- estofado (fondo de oro).
- encarnado (base de estuco).

6.- Reposo - movimiento:

-real: móviles.

- sugerido mediante :
- Ritmo: - multiplicación de líneas
- ritmo ondulante
- posición inestables movimiento de cada.

-Tensión: movimiento en potencia.

- Momento; movimiento en el acto:
- escorzo
- movimiento deambulatorio

7.- Situación del espectador:

- frontalidad
- visión angular: escorzo.
- visión en redondo.

8.- Representación espacial en el relieve: Profundidad.

- Enmarcado en fondo arquitectónico o paisajístico.
- Superposición de figuras y planos.
- Perspectiva.
- Diferente resalto en las figuras según la distancia del espectador.

9.- Composición:

- En escultura exenta: - escenas cerradas.
- escenas dispersas.

- En relieve: - adaptación al marco.
- disposición de las figuras.

10.- Función y significado

:

- función decorativa.
- otras funciones: manifestación de riqueza, de poner...

Características específicas
de la escultura.-


* Igual que la arquitectura, la escultura consiste en la formación de un volumen, pero a diferencia de aquella, no interesa el espacio interior sino precisamente el espacio que ocupa y que se percibe a través de la forma-superficie, es decir de su espacio exterior.

* Para una verdadera percepción de la escultura deberíamos tocarla: a través de la sensación tactil obtenemos una más completa noción de su textura, calidad del material, temperatura, ... Por razones de conservación las esculturas que se guardan en los museos no se suelen poder tocar ... salvo los ciegos: a ellos les suele estar permitido con lo que pueden tener una percepción distinta de la nuestra y, en ocasiones, mejor.

* Otro aspecto específico de la escultura es la noción de su masa: ésta consiste en el peso del objeto en relación a su volumen; ese peso puede ser el que tengan realmente los materiales o la sensación de peso que nos transmite la escultura.

* En el S. XX se han realizado esculturas huecas en las que el espectador debe introducirse con lo que se valora su espacio interior. Este aspecto es propio de la arquitectura, no de la escultura por lo que se deshace la frontera entre ambas. Igualmente la escultura adquiere movimiento con los móviles o la escultura cinética cuando por lo general era un arte estático que debía simular el movimiento con determinados recursos técnicos.

Tipos de escultura.-


La escultura, puesto que tiene una materia con un determinado peso, requiere un soporte donde fijarse. No se tienen en cuenta aquí las experiencias contemporáneas a base de materiales inflados con gases de peso inferior al aire y que por tanto flotan o a obras con montajes de fuerzas electromagnéticas que mantienen suspendidas las creaciones.

Podemos resumir diciendo que hay dos tipos de escultura:

* El soporte puede ser inferior y simplemente sujetarla o levantarla del suelo de forma que la escultura pueda rodearse; generalmente ese apoyo (plinton, peana, ...) es independiente de la propia escultura y está está hecha de distinto material o, al menos, de un bloque diferente. A este tipo de escultura se le denomina exenta o de "bulto redondo".

* Otro tipo de escultura es aquella cuyo soporte es lateral, no inferior, y en este caso la obra no puede rodearse por lo que su contemplación suele ser frontal. No es que se trate de una escultura exenta que se coloca junto a una pared sino que está realizada en el mismo bloque del material que le sirve de soporte. A está se le denomina escultura en relieve. Las figuras pueden estar trabajadas hacia el interior del fondo y se denomina relieve hundido o bien hacia fuera (relieve saliente) quedando el fondo en un plano interior. En este último caso según el resalto de las figuras puede ser:

- altorrelieve: aquel cuyas figuras sobresalen del fondo más de la mitad.

- mediorrelieve: aquel cuyas figuras sobresalen del fondo la mitad.

- bajorrelieve: aquel cuyas figuras sobresalen del fondo menos de la mitad

Materiales y técnicas.-


Como se indica en el apartado de Aspectos básicos hay dos tipos de escultura: la escultura exenta y el relieve; a su vez podemos encontrar relieves exteriores o rehundidos. Al tratar las técnicas de la escultura conviene empezar aclarando algunos conceptos porque la utilización actual de los mismos no corresponde exactamente con su significado etimológico inicial.

Antiguamente se utilizaba el término "esculpir" (derivado del latín sculpere) en sentido de tallar o trabajar materiales duros, mientras que el vocablo "plástica" (derivado del griego plastiké) se identificaba con el modelado o trabajo sobre materiales blandos. Finalmente el vaciado se identifica con el trabajo de los metales fundidos.

Posteriormente el significado de alguno de estos términos ha ido evolucionando. La "plástica" (plástica ratio del latín) pasó a referirse tanto al modelado como al tallado de materiales duros y por tanto a la escultura en general. Por último la "plástica" si se refiere al griego "plasso" que significa formar, hará referencia a todas las artes relacionadas con el tacto y la vista y se aleja, por tanto, de la música y la poesía. En este aspecto se referiría no sólo a la escultura sino también a la arquitectura, la pintura y las artes decorativas.

Si nos atenemos a las definiciones de la Real Academia de la Lengua encontramos las siguientes acepciones de los vocablos más usuales en escultura:

* esculpir: Del lat. sculpere.
1. tr. Labrar a mano una obra de escultura, especialmente en piedra, madera o metal.

* escultura: Del lat. sculptura.
1. f. Arte de modelar, tallar o esculpir en barro, piedra, madera, etc., figuras de bulto.
2. Obra hecha por el escultor.
3. Fundición o vaciado que se forma en los moldes de las esculturas hechas a mano.

* grabar: Del fr. graver.
1. tr. Señalar con incisión o abrir y labrar en hueco o en relieve sobre una superficie un letrero, figura o representación de cualquier objeto.

* labrar: Del lat. laborare.
2. Trabajar una materia reduciéndola al estado o forma conveniente para usarla. Labrar la madera; labrar plata.
5. Hacer un edificio (!).

* modelar: De modelo.
1. tr. Formar de cera, barro u otra materia blanda una figura o adorno.
3. Pint. Presentar con exactitud el relieve de las figuras.

* tallar: Del lat. *taleare, cortar ramas, de talea, rama.
3. Dar forma o trabajar un material.
5. Elaborar muy cuidadosamente una obra, material o no.

* vaciar y vaciado/a: De vacío.
3. Formar un objeto echando en un molde hueco metal derretido u otra materia blanda (yeso, etc.).
5. Esc. Figura o adorno de yeso, estuco, etc., que se ha formado en el molde.

Lo que coincide siempre es que la técnica que se utiliza depende del tipo de material sobre el que se trabaja: blando, duro o metal. Y si nos atenemos a los significados más comunes actualmente y simplificamos la terminología consideraremos que:

* una escultura es toda obra realizada por el escultor independientemente de la técnica utilizada: tallado, modelado, vaciado o grabado.

* tallado es la técnica que se utiliza sobre materiales duros: piedra, madera, ... A veces se aplica sobre los metales pero es más frecuente trabajar éstos con el vaciado, previamente fundidos.

* modelado es la técnica que se emplea con materiales blandos (cera, arcilla, ...) a los que se da forma con las manos e instrumentos sencillos. Se debe tener en cuenta que este término también se utiliza en la pintura en sentido de conseguir la sensación de volumen.

* vaciado es la técnica que consiste en obtener una figura a partir de un molde que se ha rellenado de un material fundido, bien sea metal, yeso , ...

* grabar hace referencia tanto a la técnica de realización del relieve como a técnicas